SARA

M i madre se llamaba  Sara.  Mi madre biologica, porque hay otra persona a la cual llamo madre desde hace muchos anos, pero eso es otra hist...

Mi madre se llamaba  Sara. 
Mi madre biologica, porque hay otra persona a la cual llamo madre desde hace muchos anos, pero eso es otra historia.
Sara fue una hermosa mujer de piel canela y negrisimo pelo  que combinaba con ojos verdes color esmeralda, profundos y atemorizadores. 
Era bien formada de cuerpo y  aunque tenia la boca pequena, su sonrisa era luminosa y confiada.
Era la  joya de Revillagigedo 219, vetusto caseron del barrio de JesusMaria donde mi familia materna tenia su cuartel general, un ajetreado lugar donde la gente entraba y salia, se hacia cafe  constantemente ,cualquiera podia almorzar o comer segun la hora y  donde se jugaba a la bolita , al bingo y se oia  a todo volumen la loteria nacional los sabados por la tarde.
Recuerdo a Sara, con el pelo  recogido hacia  atras  y en un vestido  de flores, caminando  por la calle Vives bajo el sol  del mediodia entre los  olores del almuerzo cubano .
No tuvimos la oportunidad de conocernos mejor como madre e hijo  porque por avatares del destino, no vivimos juntos al ser yo criado por  mis abuelos y mis tias, pero fue una mujer tranquila y sin grandes eventos en su vida . 
No era una mujer culta, lo cual probablemente la habria salvado de maltratos y sinsabores, era una simple muchacha de barrio con limitadas aspiraciones   pero esencialmente buena, excepto en el momento en que mintio por miedo a mi padre y provoco que este salvaje me propinara una brutal paliza.  
Tampoco fuimos buenos amigos; nuestra relacion era distante y no tengo el sentimiento de vacio  materno que por ejemplo tiene mi hermana que la conocio menos que yo, ya que al morir nuestra madre mi hermana tenia  cuatro anos. 
Pero  me trajo al mundo y me imagino que me dio todo el amor que contenia su pequena estatura hasta que quizas  en contra de su voluntad , se vio obligada a dejarme con mis abuelos.
Digo esto porque la vi cuidar de mi hermano y de mi hermana  amorosamente mientras pudo , antes de que el cancer la corroyera lenta e inexorablemente.
Sus hermosos ojos verdes se empanaban de tristeza cada vez que salia a la calle y la foto de la playa aun estremece de solo ver la extrema pesadumbre de su mirada cuando perdio un seno.
Ella era una mujer muy femenina y muy hembra, -para decirlo de algun modo- y la perdida de un seno, aun por motivos inexcusables, era algo terrible para ella, mujer de peluquerias y manicures y de perfumes y de vestidos y zapatos altos en las Giras de la Tropical y de ( me imagino) total entrega de ese hembrismo o femeneidad -como se le quiera decir- al hombre escogido.
El tiempo transcurrido entre su primera operacion y la muerte fue largo y terrible. Languidecio por meses bocarriba  en una cama, en la  casa de mi abuela y la noche antes de su muerte, yo estaba con ella.
Llama a Rebe - me dijo- con el susurro casi inaudible en el que su voz se habia convertido.
Rebe era Rebeca, mi tia  que despues de mi llamada, llego enseguida. 
Estaba muy cerca de ella cuando se incorporo sobre el brazo derecho y fatigosamente, con voz cavernosa le dijo :  - No dejes que Sixtico ( mi padre) le ponga madrastas a mis hijos.
A la manana siguiente la sacaron en  camilla hacia una ambulancia parqueada  contraria al trafico en la calle Revillagigedo. 
Murio minutos despues. Tenia 34 anos.

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1 comentario

Unknown dijo...

Un texto interesante amigo y una buena línea a seguir.

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