EL VIOLIN MAGICO

 Un vecino mío músico el, violinista por mas señas, me introdujo allá por 1984 a A Taste Of Pasión, álbum de un desconocido para mi violinista francés: Jean Luc Ponty.

Desde entonces he estado sumergido en el universo sonoro del violín mágico de Ponty. 

Su trabajo más preferido por mí es el álbum Storyteller del 89 y lo tuve grabado en casete por anos producto de una memorable sesión de grabación   durante la cual apareció de la nada en casa de otro amigo adicto a Billy Joel que despreciaba olímpicamente el jazz -fusión, mi predilección de la época (y lo sigue siendo más o menos).

Fue uno de los primeros que compre en formato CD cuando deambulaba atónito y sonador por el downtown de Montreal recién llegado a este país.

Desde el día que mi amigo el violinista me enseno que existía Jean Luc Ponty he estado escuchando sus trabajos y disfrutándolo enormemente.

Un artista excepcional que ha colaborado con monstruos como Chick Corea en quizás el álbum más apreciado por mí de los tantos que hizo el maestro Corea: My Spanish Heart.  Por ahí anda una nueva versión con otros músicos con una exquisita mezcla que despertó mi envidia, y con otros como Jon Anderson, Jeff Lorber, Elton John y la lista sería interminable.

Jean Luc Ponty ha envejecido, pero sigue tocando su violín.

Nosotros sus oyentes, hemos envejecido, pero seguimos persiguiendo sus trabajos.

Un día todos desapareceremos, pero su música estará ahí por siempre, porque espero que cuando venga el meteorito, entre las joyas de la cultura humana que recopilaran para que no se pierdan, estará algún que otro álbum de Jean Luc Ponty.